Los últimos meses de 2010 han sido realmente desastrosos en cuanto a la concesión de hipotecas para las viviendas, debido a que la situación económica no ha posibilitado que los bancos puedan haber concedido una mayor cantidad de hipotecas, especialmente porque hay mucho temor de que las personas que las soliciten no puedan pagarlas.
De todos modos el descenso de los últimos meses de 2010 no ha sido tan pronunciado como meses anteriores, lo que indica que el descenso se está moderando y poco a poco llegará hasta un mínimo.
Este 2011 no parece que pueda cambiar mucho las cosas con respecto a la concesión o no de las hipotecas para poder tener una vivienda, en especial cuando la situación apenas ha cambiado notablemente con respecto a los últimos meses, una tendencia bajista que parece ser que puede seguir adelante en los próximos meses, al menos hasta que el crecimiento de la economía pueda ser un hecho, ya que tiene mucha relación con la contratación de hipotecas y también con la compra de pisos.
No es precisamente el mejor momento para que los bancos puedan conceder hipotecas, entre otras cosas porque los bancos temen que los clientes no puedan pagar y por lo tanto se tengan que quedar con los pisos, algo que en estos momentos no es precisamente la mejor. Además del descenso de las hipotecas, el problema del Euribor es un añadido para las personas que contratan una hipoteca, ya que la cuota de la hipoteca aumenta notablemente con el aumento del Euribor.
