En el momento de firmar un contrato siempre se pueden correr ciertos riesgos. Generalmente estos provienen de la letra pequeña que existen en el tratado, ya que puede ser perjudicial para el futuro cercano o lejano, dependiendo de cada situación. En las hipotecas, hay varias clausulas que pese a ser legales pueden ser negativas. Por ese motivo, se debe prestar mucha atención y leer muy detenidamente el papel en el cual se está estampando nuestro nombre y apellido.
“En primer lugar hay que destacar que la financiación en España es transparente, ya que hay pautas comunes para una mayor protección del consumidor y del que otorga el crédito”. Esa es la opinión que sale de los que se encargan de prestar el dinero.
La otra visión es la que dice que hay que mirar todo antes de sellar el acuerdo, debido a que puede haber alguna sorpresa y desconocerla podría ser muy grave. El mayor peligro que se puede correr es que con el paso del tiempo se termina pagando más por la hipoteca de lo que se había estipulado en un comienzo. Esa no es una cuestión menor, debido a los problemas financieros que tienen varias familias en la actualidad.